"MI EX YA ESTÁ CON OTRO(A)"

Sin duda alguna para la mayoría de las personas ésto representa un verdadero problema, un gran reto a vencer. Después de todo ¿Cómo aceptar el hecho de que la persona a la cual amaste y con la que compartiste gran parte de tu tiempo y por la cual diste mucho de ti esté ya con otra persona? (Suponiendo que ésto haya sido así).

Ésto a su vez nos lleva a otra pregunta importante ¿Cómo superar el hecho de que ya está con otra persona, si aún no había superado el hecho de que hayamos terminado?

Hay que dejar en claro que ésto no solo representan un problema o reto para aquellos que se enteran de que su ex ya está con otra persona luego de unos días, semanas o meses de haber terminado la relación, sino también para muchos que ya llevan años desde que terminaron.

Está claro que en algunos casos éste hecho será más doloroso para unos que para otros. Tal y como explica el Dr. Stephen Gullo en su libro "El Shock Sentimental". Cuando se termina una relación existen dos posturas: la del rechazador y la del rechazado. Tal y como él refiere, la postura del rechazado (aquel cuya pareja le dejó saber que no se continuaría con la relación, a pesar de que éste quisiera continuar) es una de las posturas más dolorosas dentro de éste escenario. En cuanto a la postura de aquellos que representan al rechazador, encontramos que se puede dar de dos formas: el rechazador voluntario (es decir, aquel que está convencido de que ya no quiere continuar con la relación y la termina), y por otro lado, el rechazador involuntario (aquel que no quiere terminar la relación pero que no encuentra otra salida saludable o como  también puede que lo haga como un medio de manipulación para que su pareja se esfuerce a realizar los cambios que se requieren para poder continuar con la relación) en éste último caso las personas pueden llegar a experimentar la misma intensidad de sufrimiento que aquel que se encuentre en la postura de rechazado, y en muchas ocasiones hasta más.

Regresando a las preguntas iniciales, debo decir que la respuesta directa es buscando atravesar y aprender de cada una de las estapas de nuestro duelo. ¿Y qué es el duelo? Pues es la etapa de adaptación por la cual todas las personas debemos pasar para poder reestablecer el balance y la armonía en nuestras vidas. La mayoría de personas al desconocer ésto, lo que hace es intentar evadir y luchar contra el duelo (en si, ésta misma lucha constituye una parte importante de su duelo, pero si permanecen en esa actitud frente a su duelo éste podría cerrarse después de mucho tiempo e incluso quedarse abierto indefinidamente). Por ésto es común escuchar a muchas personas que dicen amar y seguir enamorados(as) de sus ex-parejas a pesar del paso del tiempo de las circunstancias. El duelo existe para que dejemos ir aquello que ya no está siendo constructivo en nuestras vidas, y depende de cada persona si se aferra o no.

Hace unos días hablaba con una persona que me decía que se sentía muy mal y muy triste por que se había enterado que su ex-pareja (terminaron 7 meses atrás) estaba con otro. Me contaba que él había terminado la relación porque estaba cansado de la indiferencia de la que fue su pareja. Al principio refiere haberle chocado por unas semanas, pero que luego se dedicó a evitar pensar en ello para solo enfocarse y salir, tomar y divertirse. a lo largo de los 7 meses lo logró, pero no pudo evitar el dolor incontenible de enterarse que su ex estaba con otro. Lo que pensaba superado, solo había sido evadido.

Lo más complejo vino luego. Ésta persona me dijo que a lo largo de los 5 años que habían tenido de relación, 4 habían sido (la mayor parte del tiempo) negativos. Sin embargo, recalcaba que también habían tenido momentos buenos y que su ex era una buena persona. En un primer momento, noté (como sucede en la mayoría de los casos) que lo estaba idealizando (le daba mayor importancia de la que realmente tenían a los aspectos positivos de su relación) y minimizaba (le daba una menor importancia a los aspectos negativos de su relación) lo negativo en su ex. Estos pensamientos representaban gran parte de su sufrmiento emocional, sin embargo, había que sumarle a esto el hecho de que mantenía la creencia de que uno debía permanecer por lo menos solo durante un año para demostrarle a sus ex-pareja lo importante que había sido en su vida.

El caso de ésta persona, grafica muy bien como las personas tendemos a reaccionar y a pensar en el instante en el cual nos enteramos que nuestra ex-pareja encontró a alguien más. Incluso, prolongamos indefinidamente el sufrimiento al someternos por horas a pensar si es que la otra persona será mejor que uno (física o mentalmente), si se llevará mejor con el/ella, si la/lo hará feliz, etc. Uno se sumerge en un mundo de comparaciones que a lo único que nos llevan es a intentar degradar en nuestra mentes a la nueva pareja de nuestros/as) ex-parejas para sentirnos superiores a ellos/ellas. Además, asumimos un rol de martir con frases como "nadie nunca te amará como yo, a pesar de todas las cosas que me hiciste" o "haber si el/ella te va a aguantar todo lo que yo te aguanté". Para luego pasar a la contradicción de pensar "Que tendrá el/ella que no tenga yo, que lo/la prefirió" (a pesar de haber ya terminado varios meses atrás incluso y además aceptando que la mayor parte de la relación fue negativa) o "el/ella debe ser mejor que yo para haber logrado quedarse con el/ella" (como si ésta nueva persona se hubiera sacado un gran premio de lotería al haberse quedado o empezado una relación con aquel/lla que le hizo sufrir.

Entonces, mi intensión con éste primer post acerca de éste tema es ayudarles a comprender la importancia de asumir nuestro duelo cuando salimos de una relación. Que sepamos que existe una etapa de adaptación por la cual es saludable atravezar luego de un cambio tan significtivo como lo es una ruptura amorosa. Les hablaré más acerca de ésto en mi próximo post.

¡Espero les haya gustado el post! También pueden ver mis videos en mi canal de Youtube: www.youtube.com/user/elconsultoriodemario

¡Ánimo y fuerza! :)