miércoles, 1 de diciembre de 2010
NO SÉ DECIR "NO"
¿Les ha pasado? Creo que muchos hemos tenido éste problema en nuestras vidas. Decir "no" es algo que muchas veces supone un "conflicto" externo, con aquel al cual tememos se vea afectado por nuestra respuesta, lo cual buscamos evitar a toda costa, dejando que el único afectado sea uno mismo.
Existe una intolerancia al conflicto, se le interpreta como algo "malo", sin embargo, en dosis razonables es bastante bueno, pues permite que inicie el proceso de ajuste y adaptación a las circunstacias.
Si uno calla, se pierde en la pasividad y a la represión a la cual conlleva. Uno se "guarda" las cosas, hasta que se acumulan y luego uno explota. Con lo que se puede concluir que en realidad uno por más que busque evitar el conflicto, solo lo posterga y entre más tiempo pasa, más difícil de manejar se hace.
Cuando uno calla y no explota, incluso uno puede correr el riesgo de desarrollar una depresión, o quizá sin darse cuenta, ya esté atravezando por una.
Aprender a decir "no", requiere una decisión consciente de un cambio en el hábito de vida y estilo de comunicación que mantiene. Permitirse, gradualmente ir diciendo que no a diferentes personas o circunstancias. Esto en un comienzo puede suponer un malestar, pero que les aseguro no será más grande al que ya están experimentando.
Muchas veces, uno evita decir "no", como les decía para evitar un conflicto, adelatándose a sacar conclusiones, pensando "si le digo que no, seguro lo tomará mal" y en realidad muchas veces la otra persona no lo tomaría así. Con lo que nos complicamos innecesariamente.
Entonces, si el día de hoy tienes a alguien al cual te mueres de ganas de decirle que no en algo, no te reprimas una vez más, ve y dicelo. Eso si recuerda ser asertivo(a) como les he sugerido muchas veces. Si se genera un conflicto, no teman, simplemente estén dispuestos a manejarlo en su debido momento.
Recuerden que el malestar que supone el conflicto de decir "no" puede ser desagradable, pero solo dura un momento (si se enfocan en la solución del mismo y no en el conflicto en sí mismo). Mientras que el conflicto que implica no decir "no" es definitivamente más desagradable y dura mucho más. Si uno no busca aprender a decir "no" el malestar le puede durar toda su vida.
¡Comencemos hoy! La vida es un aprender y experimentar. Comencemos desde lo más fácil a lo más difícil. ponte a pensar en cuantas cosas haces y dices que ya no quieres seguir haciendo, y en las personas que piensan que si eres feliz haciéndolas, buscalás y expresales ese liberador "NO".
Ánimo y fuerza, sé que les irá más que bien!
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