¡Gracias mujeres!, ¡Gracias por existir! Me pareció y me parece más apropiado agradecerles que felicitarlas (obvio que también hago los segundo, pero sobre todo creo que hoy es un día para agradecerles a más no poder).
Dentro de mi agradecimiento quiero dedicar éste post a las mujeres que desde que vine al mundo han atravesado conmigo por los momentos más difíciles y los más felices (acompañandome incondicionalmente en las malas, y siendo la causa de todo lo bueno que me ha pasado).
He tenido la gran suerte y bendición de crecer rodeado de mujeres toda mi vida; mi mamá, mi hermana, mi sobrina, mi abuelita, tía Mónica, mi tía Patty, y debo decir que sin ellas y todas sus enseñanzas hoy no sería quien soy; una persona inmensamente feliz. Y en los próximos meses tedré la bendición de estar rodeado de una más, mi desde ya más que amada sobrina nieta.
Creo que hoy es un día importante en el que no solo basta con agradecerles y felicitarlas, sino de demostrarles (los hombres) que realmente nos importa y reconocemos la importancia de su existencia para el balance perfecto entre los géneros y para el sostenimiento de la sociedad. Es un día en que todos las personas debemos oponernos enérgicamente a cualquier tipo de expresión de violencia contra la mujer, de oponernos enérgicamente a los prejuicios y estereotipos que tanto daño viene causando a la sociedad global. Y si de verdad queremos cumplir con esta tarea debemos cumplir con educarnos y educar a los que vienen acerca de la importancia y necesidad de las mujeres para el adecuado desarrollo familiar, personal, social, emocional de los seres humanos.
¡Gracias mujeres por enseñarme las cosas más importantes de la vida!
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